Ninguna persona en el mundo ha hecho lo que hizo con un balón de fútbol. El llanto de Burzaco se generó luego de que el ex titular de la federación de fútbol de Perú Manuel Burga le hiciera un gesto amenazante (se pasó el dedo índice por el cuello) en dos oportunidades. Por eso, es imprescindible que un jugador de éxito también sea una persona cultivada y con una preparación académica que le permita forjarse un futuro profesional una vez acabada su carrera deportiva. Diego es un dios en Argentina, por eso fue especial regalarle la camiseta”, finalizó Matthaus en el Daily Mail.





